La Cueva de los Verdes representa uno de los fenómenos geológicos más fascinantes de Canarias, situada en el municipio de Haría, Lanzarote. Este extraordinario túnel de lava se formó hace unos 4.000 años durante las erupciones del volcán de la Corona y, con una longitud total de más de 6 kilómetros, 1 kilómetro de los cuales es accesible a los visitantes, la cueva ofrece un viaje único al vientre de la tierra. La estructura está construida en varios niveles, creando un intrincado sistema de túneles y cámaras volcánicas que dan testimonio del poder de las fuerzas naturales que han dado forma a la isla.
En el siglo XVIII, la cueva sirvió de refugio a la población local durante las incursiones piratas, lo que demuestra la importancia tanto histórica como geológica de este lugar. Hoy, gracias a una hábil intervención de iluminación artística del artista Jesús Soto, los visitantes pueden admirar las extraordinarias formaciones rocosas y los juegos de luz que hacen que este lugar sea aún más impresionante.

La Cueva de los Verdes es una experiencia subterránea única, donde la naturaleza y la historia se entrelazan de forma fascinante. La visita guiada por este túnel de lava te permite descubrir uno de los ejemplos más impresionantes de arquitectura volcánica natural del mundo, realzado por una iluminación artística que realza su belleza primigenia.
El túnel principal de la Cueva de los Verdes representa una de las formaciones geológicas más espectaculares de las Islas Canarias. Este increíble corredor natural se formó cuando la lava más superficial se enfrió y solidificó, mientras la lava de abajo seguía fluyendo, creando este vacío subterráneo. Las paredes muestran extraordinarias vetas de diferentes colores, desde el rojo al negro, pasando por varios tonos de ocre, testimonio de la compleja composición mineral de la lava. El techo, de hasta 10 metros de altura en algunos lugares, presenta formaciones de estalactitas creadas no por la piedra caliza como en las cuevas kársticas, sino por la solidificación de la propia lava.
La particular conformación del túnel, con sus paredes lisas y formas sinuosas, cuenta la historia del flujo de lava que lo generó. Los visitantes pueden observar las «repisas de lava» a lo largo de las paredes, que indican los distintos niveles alcanzados por el magma durante las sucesivas erupciones, ofreciendo un extraordinario libro abierto sobre la historia geológica de Lanzarote.
Uno de los puntos más sorprendentes de la visita es el auditorio natural, una vasta cámara volcánica que puede albergar hasta 500 personas. Esta sala, con su excepcional acústica natural, se sigue utilizando hoy en día para conciertos y actos culturales. Las paredes curvadas y la forma especial de la roca crean unas condiciones acústicas perfectas, transformando este espacio subterráneo en una auténtica sala de conciertos natural.
La combinación de iluminación artística y la arquitectura natural de la cueva crea una atmósfera casi surrealista en este entorno. Las luces, hábilmente colocadas, realzan las texturas de las paredes de lava y crean efectos de sombra que aumentan el dramatismo del espacio. Durante los eventos musicales, la experiencia se vuelve aún más mágica, con notas que parecen proceder de las entrañas de la propia tierra.
La Cueva de los Verdes esconde una sorpresa especial que sólo se desvela durante la visita guiada: el famoso «secreto de la cueva». Este particular elemento, que no puede desvelarse con antelación para no estropear la sorpresa a futuros visitantes, es uno de los momentos más memorables de la visita. Se trata de un fenómeno óptico natural que ha fascinado a generaciones de visitantes y muestra cómo la naturaleza puede seguir sorprendiéndonos con sus trucos visuales.
Este aspecto concreto de la visita se ha convertido en uno de los momentos más destacados de la experiencia, generando reacciones de asombro y maravilla en todos los visitantes. El guía crea hábilmente expectación para este momento, haciendo que la revelación sea aún más sorprendente y memorable.
Sólo se puede acceder a la Cueva de los Verdes mediante visita guiada o comprando las entradas por adelantado en Internet. Especialmente para las visitas guiadas, es aconsejable reservar con antelación durante la temporada alta.
La cueva está abierta todos los días de 09.30 a 16.15.
Las visitas guiadas comienzan aproximadamente cada 30 minutos y duran unos 45 minutos.
Cierra el 25 de diciembre.
La Cueva de los Verdes se encuentra en la parte norte de la isla de Lanzarote, en el municipio de Haría. Se puede acceder fácilmente a la atracción desde el aeropuerto César Manrique-Lanzarote, que está a unos 25 kilómetros. El trayecto desde el aeropuerto dura unos 30 minutos por la LZ-1 en dirección norte.
Desde Arrecife, la capital de la isla, el trayecto es de unos 20 kilómetros y se tarda 25 minutos en coche. Desde Puerto del Carmen, uno de los principales centros turísticos de la isla, el trayecto es de unos 35 kilómetros y se tarda 40 minutos. También es posible llegar a la cueva en autobuses turísticos que salen de los principales centros turísticos de la isla, aunque el coche sigue siendo la opción más cómoda y flexible.
El aparcamiento en la cueva es gratuito y está bien organizado, con amplio espacio para coches y autocares turísticos. Las señales de tráfico son claras y claramente visibles a lo largo de toda la ruta.
La Cueva de los Verdes se encuentra en el norte de Lanzarote, a unos 23 kilómetros de Arrecife. La cueva forma parte del sistema volcánico de Monte Corona y está a sólo 5 kilómetros de los Jameos del Agua, otra atracción volcánica ineludible. Su ubicación estratégica facilita combinar la visita con otras atracciones del norte de la isla, como el Mirador del Río y el Jardín de Cactus.