Lo primero que viene a la mente al preguntarse qué ver en Madrid son sus célebres museos: ¿qué otra ciudad puede presumir de tener tres de los museos más prestigiosos del mundo? Concentrados en una sola calle, que ha sido acertadamente bautizada como el Paseo del Arte, el Prado, el Reina Sofía y el Thyssen-Bornesmiza son las principales atracciones de Madrid.
Pero la elegante capital de España es una mezcla única de majestuosidad monumental y excentricidad: los turistas de vacaciones en Madrid pueden visitar tanto un suntuoso palacio real como un auténtico templo del antiguo Egipto, ir de compras por las elegantes tiendas de marcas famosas de la Gran Vía o por los coloridos mercados de barrio, pasear por elegantes plazas o admirar un legendario estadio desde las alturas. Entre visita y visita, los parques de Madrid ofrecen un oasis de relajación y descanso.
En una ciudad que ofrece tanto, apunta lo mejor: aquí tienes las atracciones imprescindibles de Madrid.
La reputación turística de Madrid está ligada en gran medida al Museo del Prado, una de las instituciones culturales más prestigiosas del mundo, que por sí sola atrae a más de tres millones de visitantes al año a la capital española.
Es un museo gigantesco que recorre la historia de la pintura española y europea desde el siglo XIII hasta el XIX, con una colección de valor incalculable que incluye obras de artistas inmortales como Goya, Velázquez, Tiépolo, Tiziano, Durero, Rubens, Rogier Van Der Weyden, El Greco y El Bosco.
Para muchos turistas, decir Museo Nacional Reina Sofía sólo significa una cosa: Guernica, el famoso cuadro de Pablo Picasso que representa las atrocidades de la Guerra Civil española.
Si no cabe duda de que esta obra genial y conmovedora merece por sí sola el precio de la entrada, hay que decir que hay muchas obras de valor incalculable expuestas en este museo dedicado al arte moderno y contemporáneo.
Podrás admirar obras maestras de Dalí, Miró y Picasso, los tres grandes de la pintura española del siglo XX, y de muchos importantes artistas internacionales, y conocer a fondo la complejidad del arte contemporáneo.
Incluye el Museo Thyssen-Bornemisza en tu lista de museos imprescindibles de Madrid. El menos famoso de los tres grandes museos de Madrid no es menos interesante: alberga una extraordinaria colección reunida apasionadamente por dos barones alemanes. Después de visitarlo, ¡tú también te preguntarás cómo fue posible reunir semejante patrimonio artístico en sólo dos generaciones!
La colección del Museo Thyssen-Bornemisza incluye obras de los siglos XIV al XX y desarrolla movimientos y corrientes que sólo están representados marginalmente en el Museo del Prado y el Reina Sofía, como el Impresionismo, las vanguardias y el arte pop; también hay una sección dedicada a la pintura norteamericana.
La atracción turística más visitada de Madrid después de los grandes museos está dedicada a una de las grandes pasiones de los españoles: el fútbol. El estadio Santiago Bernabéu, sede del Real Madrid, el laureado equipo español, es un templo del deporte: aquí se han disputado partidos históricos como la final del Mundial 82 ganada por Italia y han jugado algunos de los mejores futbolistas del panorama internacional.
Revive las emociones de los grandes desafíos futbolísticos haciendo el Tour del Bernabéu: podrás admirar una vista panorámica del estadio, visitar un museo lleno de copas, camisetas y balones, consultar un archivo digital con vídeos históricos e inéditos, pero sobre todo tendrás acceso a las zonas normalmente reservadas a los protagonistas, como los vestuarios, el túnel de entrada al campo, el palco de prensa y el balcón presidencial.
Añade un toque de clase a tus vacaciones en Madrid visitando el Palacio Real, la mayor residencia real de Europa: con sus tres mil habitaciones es mayor incluso que Versalles.
Sólo podrás visitar «únicamente» 50 de ellas, pero será suficiente para que quedes hechizado por el esplendor y la opulencia de este palacio histórico, una obra maestra barroca con influencias neoclásicas.
Sigue siendo oficialmente la residencia de los reyes de España, pero no esperes encontrarlos en casa: de hecho, el Palacio Real sólo se utiliza para ceremonias oficiales, mientras que los reyes viven en otro palacio fuera del centro.
Una de las principales arterias del centro de Madrid es la famosa Gran Vía, resultado de un enorme proyecto de renovación urbana que exigió la demolición de no menos de trescientas casas y la modificación de 50 calles a principios del siglo XX.
Hoy, esta larga avenida bordeada de elegantes edificios, abarrotada a todas horas del día, es famosa por las compras: tiendas históricas como la lujosa Loewe encuentran espacio junto a las megatiendas de las grandes cadenas internacionales.
El último tramo de la Gran Vía está repleto de teatros, muchos de los cuales presentan musicales y le han valido a la zona el sobrenombre del Broadway madrileño; también hay cines históricos y un gran número de restaurantes, bares y discotecas.
Las plazas son el corazón palpitante de cualquier gran ciudad y Madrid no es una excepción. Las plazas del centro son grandes y elegantes, a menudo resultado de obras de ampliación y remodelación ordenadas por los reyes a lo largo de los siglos.
La plaza más grande de Madrid es Puerta del Sol7, que representa simbólicamente el centro de toda España. Es una sencilla placa en la acera la que le confiere esta característica simbólica: se trata de la placa que indica el «kilómetro cero», el punto desde el que irradian hacia el exterior las distintas carreteras nacionales que conducen desde la capital a los puntos más dispares del país.
Una visita obligada para todos los turistas es la magnífica Plaza Mayor8, cuyo aspecto actual data de finales del siglo XVIII. El monumental Arco de Cuchilleros, una de las nueve entradas a la plaza, es uno de los rincones más fotografiados de toda la ciudad: a través de una escalinata, el arco conecta la Plaza Mayor con la Cava de San Miguel y la diferencia de altura entre ambas es visualmente sorprendente.
Un lugar especial en el corazón de los madrileños pertenece a Plaza de Cibeles9, famoso porque los seguidores del Madrid se reúnen aquí para celebrar las victorias futbolísticas y mucho más.
El pulmón verde de Madrid es el Parque del Retiro, que seguramente ya habrás visto en muchas postales y fotos de la ciudad. Definitivamente fotogénico es el lago artificial con el Monumento a Alfonso XII al fondo. Si estás en Madrid de vacaciones para dos, no puedes dejar de alquilar una pequeña barca de remos y pasar un par de horas en total romanticismo.
El parque es realmente enorme y podrías pasar aquí un día entero paseando por sus caminos y jardines, visitando las exposiciones de arte del Palacio de Cristal y del Palacio de Velázquez, tomando café en una terraza al aire libre o admirando las estatuas, monumentos y edificios que adornan esta parte de Madrid tan querida por sus ciudadanos.
La atracción más extraña y a la vez más llamativa de Madrid es el Templo de Debod, un auténtico templo egipcio del siglo II a.C. transportado piedra a piedra desde su ubicación original a lo largo del valle del Nilo hasta Madrid como «regalo» del gobierno egipcio.
Situado ahora dentro del parque del Cuartel de la Montaña y rodeado por un estanque de agua que se asemeja al río, es una vista magnífica que se vuelve aún más emocionante al atardecer o al anochecer, cuando la belleza del templo se ve realzada por las luces y los reflejos en el agua.
De todos los mercados de Madrid, el más famoso y el que cuenta con mayor número de puestos es Mercado del Rastro12, que comenzó como un mercadillo y se ha ampliado enormemente con el paso de los años.
Los gourmets no deben perderse Mercado de San Miguel13, un mercado cubierto que se considera un verdadero paraíso gourmet. Desde caviar hasta tapas, puedes probar todo tipo de delicias españolas e internacionales y comprar alimentos de primera calidad, incluidos algunos difíciles de encontrar.
Menos conocido entre los turistas pero no menos pintoresco es Mercado de San Fernando14, un mercado cubierto en el animado barrio multiétnico de Lavapiés, donde puedes encontrar comida, ropa, accesorios y librerías. El puesto más original es La Casquería, que vende libros de segunda mano … ¡al peso!
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Los free tours son una alternativa viable a las visitas guiadas tradicionales. Funcionan así: la participación es gratuita y al final de la visita puedes dejar una propina a tu elección. A continuación encontrará nuestras visitas gratuitas favoritas, si no, puede ver la lista completa visitando esta página.
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